Vélez intentó, pero no paso del empate con Patronato

Vélez fue superior ante un Patronato que resistió e igualaron 1 a 1 en un aceptable encuentro que disputaron esta noche, en Paraná, en el marco de la primera jornada de la Liga Profesional.

Lucas Janson, a los 14 minutos, adelantó al equipo visitante, mientras que Jonathan Herrera a los 42 de la primera etapa, de penal, marcó la igualdad para el local.

Con buen fútbol y por la necesidad de ganar para engrosar el promedio, Patronato tuvo unos primeros 10 minutos más que interesantes, en los cuales logró anular el juego de la visita y lo incomodó dentro del campo de juego.

Pese al buen inicio del local, Vélez en una jugada aislada, pero bien combinada, encontró el camino al gol: Luca Orellano realizó una destacable maniobra individual, en la que dejó a su marca pagando y tocó para Nicolás Garayalde, quien asistió a Janson para que con un remate a colocar ponga a su equipo 1-0 arriba en el marcador.

El tanto significó el renacer del equipo de Liniers, ya que con la fórmula Garayalde-Janson, no solo creció en el juego, sino que logró poner en aprietos al "Patrón" y pudo ampliar la ventaja, pero no estuvo acertado y dejó con vida a un equipo que se juega mucho en esta temporada para no descender a la Primera Nacional.

Justamente por esa necesidad, Patronato aprovechó las desatenciones defensivas de Vélez y en el spring final se encontró con un polémico e infantil penal por parte de Perrone, quien tomó de la camiseta a García y con la complicidad del VAR, el árbitro Baliño, sancionó la pena máxima, la cual Herrera con un violento remate dejó sin chances al arquero Hoyos que intentó detener el disparo sin éxito.

Ya en el complemento, los primeros instantes fueron un "deja vú" de la primera etapa: El local dominó, el visitante sufrió, pero nuevamente los dirigidos por Facundo Sava no lograron plasmar lo realizado en el campo al marcador.

Pasado el cuarto de hora, Vélez controló los hilos del cotejo, se adueño de la pelota, apostó a las individualidades de Orellano y Soñora, y minó de jugadores el campo de Patronato que se refugió, apeló a la resistencia y obligó a que se jugará por medio de centros, en los cuales ganó siempre en despejes.

Con el correr de los minutos, el local eligió cuidar el punto y no en ir por la victoria, ya que el entrenador realizó cambios defensivos e increíblemente quedó mal parado en varias ocasiones, pero no pasaron a mayores debido a que el conjunto de Liniers careció de velocidad y sincronización para lastimar. (NA)